- Así lo manifiesta la directora de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación, Mercedes Siles, en el número 433 del boletín ‘Cermi.es semanal’.
- Enlace a todos los contenidos de la publicación de esta semana: http://semanal.cermi.es/boletin/1156.aspx?pre=1
(Madrid, 23 de abril de 2021). – La Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA), organismo que tiene como objetivo mejorar la calidad del sistema de educación superior, junto con 64 universidades españolas, ha realizado un informe para establecer un marco de mejora de actuaciones en materia de empleabilidad de los titulados, que concluye que “hay que tener en cuenta la inclusión, centrada en las necesidades específicas de cada persona”.
Así lo expresa la directora de esta entidad Mercedes Siles en una entrevista publicada en el número 433 del boletín ‘Cermi.es semanal’,en la que señala que en esta iniciativa del Observatorio de la Calidad del Sistema español de Universidades de ANECA se hace hincapié enatender aspectos como la accesibilidad, el diseño universal y la adecuación a las necesidades de cada perfil, entre otros.
Entre las actuaciones en las que están trabajando en esta materia, destaca la firma de un convenio de colaboración con Fundación ONCE para desarrollar un sello de inclusión social, o la creación de una Unidad de Inclusión Social, al tiempo que tienen previsto poner en marcha un sello de empleabilidad en el que tener en cuenta la discapacidad y la inclusión social “se valorará especialmente”.
En cuanto a la demanda del CERMI de mejorar el acceso de las personas con discapacidad a una plaza de personal docente e investigador en las universidades españolas, Siles afirma que se ha dictado una resolución para que la discapacidad no sea un obstáculo a la hora de lograr la acreditación. “Quienes tengan un grado de discapacidad muy grande no tendrán que aportar méritos de estancias de investigación; a quienes tengan un grado de discapacidad elevado o moderado, se les otorgará el 75% o el 50%, respectivamente, de la puntuación total por estancias de investigación”, subraya.
Por otra parte, este número del cermi.es semanal también recoge las principales demandas del movimiento asociativo de la discapacidad, representado por el CERMI, en el marco del Día Internacional de la Convención de la ONU (3 de mayo), para lo que exige el derecho de las personas con discapacidad a una vivienda accesible, asequible e inclusiva, “elemento esencial para una vida independiente y participativa”.
En materia de formación, el boletín incluye un artículo de opinión firmado por José Luis Aedo, presidente de la Comisión de Educación Inclusiva del CERMI, quien analiza las demandas de la plataforma de la discapacidad a la nueva Ley de Formación Profesional anunciada por el Gobierno, a la que ven como “una oportunidad para la implantación plena de la dimensión inclusiva” y poder favorecer así a los más de 12.000 estudiantes con discapacidad que actualmente cursan algún ciclo de FP.
Asimismo, Teresa Palahí, coordinadora del Grupo de Trabajo de Transformación Digital del CERMI, también firma otro artículo de opinión sobre cómo la tecnología puede generar el verdadero valor social que necesita la sociedad y, en especial, las personas más vulnerables.
La publicación también incorpora dos reportajes: uno centrado en la campaña audiovisual de concienciación ‘#QueNadaNosSepare’ de DOWN España, realizada con motivo del Día Internacional del Síndrome de Down; y otro sobre el estudio ‘La violencia sexual en las mujeres con discapacidad intelectual’, editado por el Ministerio de Igualdad y realizado por la Fundación CERMI Mujeres.
Por otra parte, se destaca la presentación del V Estudio ‘Universidad y Discapacidad’, que, realizado por Fundación Universia, aborda el grado de inclusión social de las personas con discapacidad en el sistema universitario español.
Por último, y entre otros contenidos, se incluye el llamamiento del movimiento de la discapacidad para marcar la casilla de la X Solidaria en la declaración de la renta “porque lo social nos necesita más que nunca”; y la reivindicación del CERMI para considerar el Derecho de la Discapacidad como “una rama autónoma propia” dentro del ordenamiento jurídico y como “un instrumento clave” para la protección de las personas con discapacidad.